Una Jeannette Jara pasando a la ofensiva principalmente para alinear a una izquierda marcada por el “derrotismo”, y consiguiendo así incomodar a José Antonio Kast y sacar algo de ventajas es la conclusión mayoritaria de analistas al revisar el debate de segunda vuelta en Archi, aunque todos con un matiz: hacerlo mejor en el debate no le alcanza, sea por que tampoco sucedió ningún error extraordinario de Kast, o bien porque de frentón este tipo de foros ya no mueven tanto la aguja.

(…) Una opinión distinta tiene el vicedecano de Gobierno UDD, Rodrigo Arellano: “Jara fue por todo. Atrás quedó la candidata con que se podía dialogar, fue su tono más agresivo. Confundió contrastar ideas con una actitud de ‘Sin Filtro’, y no creo sea la estrategia para revertir la enorme diferencia. Es para consolidar la votación de centroizquierda. Le falta épica y un relato que fortalezca su campaña”.