Señor Director:
Junto con entender que las RUF (Reglas de Uso de la Fuerza) deben ser lo más simples posible y se conviertan en la protección legal de los uniformados en el resguardo del estado de derecho, es fundamental que el Ministerio Público y el Poder Judicial instalen una línea de trabajo que no extreme ni fuerce la interpretación de la norma para someterlos a juicio ideológico.
La sola RUF como listado de situaciones diseñado en una oficina, no es el adecuado escudo para enfrentar al crimen organizado y a la nueva delincuencia.
Los uniformados se inhiben si no cuentan con el respaldo legal, y los delincuentes lo saben.
Jorge Sanz Jofré
Académico U. del Desarrollo