La evolución del covid-19, que parecía controlada en el planeta, ha vuelto a resurgir con una variante denominada como JN.1 y conocida como «Pirola», que mantiene en alerta a expertos y a una población que parecía haber dejado en el pasado el impacto de la pandemia.
Esta nueva subvariante de ómicron se ha reportado en casi 50 países, y el alza de casos de contagios ha llevado a que España -que reporta cerca del 45% de nuevos casos con esta cepa- retome el uso obligatorio obligatorio de mascarillas en los centros de salud.
Paula Daza, directora ejecutiva del CIPS-UDD (Centro de Políticas Públicas e Innovación en Salud de la Universidad del Desarrollo) manifestó que aunque la variante «Pirola» no produce mayor gravedad, resulta necesario que las personas mayores, las personas inmunocomprometidas y quienes padezcan alguna enfermedad crónica, mantengan el autocuidado y sus vacunas al día.
«La nueva variante del virus SARS-CoV-2 es una variante de la ya conocida Ómicron. Sabemos que es mucho más contagiosa, sin embargo, no se ha detectado que sea más grave y tampoco que produzca mayor mortalidad. Los síntomas de esta variante son similares a los de las anteriores. Principalmente consisten en dolor de garganta y síntomas de resfrío, pero puede presentar dolores musculares, dolor de cabeza, también tos, incluso síntomas gastrointestinales, como vómitos y diarrea».
«En Chile, hoy día, lo más importante es tener una buena cobertura de vacunación, que todas aquellas personas a las que le corresponde la nueva dosis se la coloquen y que todas las personas mantengan su calendario de vacunación al día. En caso de tener síntomas respiratorios, resfrío, tos o algún dolor muscular o incluso síntomas digestivos, nos tenemos que testear para saber si estamos con el covid-19 y; si estamos con el covid-19, tomar las medidas preventivas», precisó Daza.