Si bien el tema se volvió crítico con la pandemia, Paula Daza, directora ejecutiva del Centro de Políticas Públicas e Innovación en Salud de la UDD, asegura que el problema se pudo evitar.
La exsubsecretaria de Salud cuestiona que en 2020 el Congreso rechazara el proyecto que creaba un seguro catastrófico para pacientes de Fonasa, pues ello, dice, podría haber amortiguado esta situación: “Sabíamos que esto iba a suceder, obviamente la pandemia ha tenido una incidencia en aumentar la demanda, pero también hay un problema grave de gestión en el sistema público y no se le ha puesto urgencia, sobre todo en las listas de espera de cáncer”.
Para el exministro de Salud y presidente del IPSUSS de la U. San Sebastián, Enrique Paris, se debe mejorar “con gestión, con incorporación de la atención público-privada. Tal vez hacer operativos de salud en lugares donde hay más necesidades, incorporar a las universidades, a otros equipos de salud, para trabajar en bajar rápidamente las listas de espera”.
A raíz del caso del Sótero del Río, añade, “todo el personal sanitario debe mantener una alta consideración con respecto a la ética, y ese es un tema que no se ha tocado con suficiente claridad”.
Paris enfatiza en que “la pandemia ya pasó, el Gobierno actual ha decretado el fin de la pandemia, por lo tanto, el hecho de que las listas de espera aumenten significa que falta gestión, falta una buena utilización de los recursos, de los pabellones”.
Los casos pendientes son cerca de 2,4 millones las personas que se encuentran actualmente en lista de espera por una consulta de especialidad, y 331.840 quienes están en espera de una cirugía.