SEÑOR DIRECTOR:

Han pasado 365 días desde que Gabriel Boric asumió la responsabilidad política más importante de nuestro país. Es el momento de hacer balances y evaluar el primer año de su mandato. Es un hecho de la causa que el Presidente no tiene la misma base de apoyo con que partió. Si bien ha tenido buenas noticias en los últimos sondeos, lo cierto es que está muy lejos de los buenos números que tenía en marzo del año pasado.

¿Cuáles son las causas de esta caída? Usando palabras que el mismo Presidente Boric utilizó, este ha sido un gobierno con más desprolijidades que aciertos. Los errores en Cancillería, los indultos de fin de año, o la postergación innecesaria del TPP11 son solo algunos de los desaciertos que podemos señalar, pero sin duda fueron dos los “hitos” que han afectado en mayor medida este balance. El primero fue la conformación de un equipo político desbalanceado entre las dos coaliciones que lo acompañan en su labor de gobernar y sin la experiencia necesaria para los desafíos que significa estar en La Moneda. Esto fue lo que trató de corregir con las incorporaciones de Tohá y Uriarte en Interior y Segpres, respectivamente, en reemplazo de Siches y Jackson.

Y en segundo lugar, la forma en que enfrentó el fracasado proceso constituyente. El hecho de condicionar el éxito de ese proceso al rumbo de su gobierno se transformó en un error que aún no ha podido corregir. El excesivo involucramiento, y por consecuencia la inactividad de la agenda programática, propinó un golpe muy profundo que ha tenido a gran parte del gobierno desorientado hacia dónde debe ir el rumbo de las políticas públicas. La mejor muestra de esto último fue el fracaso que le propinó el Congreso a la reforma tributaria.

El día de ayer fuimos testigos de un nuevo cambio de equipo en el gobierno. Nuevos ministros y subsecretarios enfrentarán los desafíos de guiar las riendas de las políticas de Chile. Por el bien del país deberán rápidamente enmendar los errores y deficiencias de sus antecesores. No podemos seguir con un gobierno que parece en rodaje.

Rodrigo Arellano

Vicedecano Facultad de Gobierno

Universidad del Desarrollo