Analistas señalan que debe ampliar su masa electoral apuntando al centro, pero cuidando que no se escape la UDI más conservadora.
Con un total de 659.570 votos según el último recuento del Servicio Electoral, Sebastián Sichel ganó ayer la primaria presidencial de Chile Vamos en todas las regiones. En siete de ellas obtuvo más del 50% de los sufragios dirigidos a su sector, incluyendo O»Higgins donde marcó un 57%.
Ahora, deberá diseñar una estrategia para ampliar su base electoral, sumando para ello a los partidos políticos, pese a que en la campaña los criticó y enfatizó su condición de independiente como un valor. Más aún cuando no todos estaban convencidos de invitarlo a la primaria del sector.
Tarea difícil para Sichel, si se considera que debe apuntar desde independientes hasta lavinistas duros que podrían verse tentados en apoyar al ex UDI y actual Republicano José Antonio Kast.
En el comando de Sichel lo tienen claro. Ya anoche en Tolerancia Cero el coordinador general de la candidatura de Sichel, Pedro Browne, señaló que “se van a convocar a todas las fuerzas políticas que puedan adherir”.
Y esta mañana en T13radio el coordinador político de la campaña, Juan José Santa Cruz, señaló que “si se pretende encabezar una coalición, es con los partidos y no contra los partidos. Hay que integrarlos, e integrarlos de la mejor forma, ese es el desafío que tenemos a contar de hoy”.
“Ni Sichel ni Boric la tienen nada de fácil”, advierte Roberto Munita, analista RN y experto en comunicación política. Ello, porque ambos deben ampliar su base electoral al centro y evitar perder los votos más duros de los partidos que en teoría ahora los apoyan.
“Sichel debería irse más al centro, aunque podría abrir un flanco que aproveche Kast. Lo primero sería hablarle a un público lo más amplio posible, inclinándose a los huérfanos de la ex Concertación, que tienen una raíz muy similar a la raíz de la centro derecha”, agrega. Y señala que “hay una alianza tácita entre el antiguo mundo concertacionista y la centro derecha más moderna que se está construyendo”.
Y ahí el vínculo con Ignacio Briones es fundamental (el candidato de Evópoli obtuvo 131 mil votos). “La presidencial de noviembre se va a definir en quien logra atraer más gente del centro político. Creo que la figura de Ignacio Briones, que optó por una candidatura de centro dentro de CHV, lo puede ayudar en esa dirección”, dice Sebastián Izquierdo, de Horizontal.
Pero el desafío también implica convencer a Kast y sus electores que el peor escenario es llegar divididos a noviembre. “Deben entender que el escenario sería brutal”, dice Munita. Si eso ocurre, vaticina, hay riesgo de no llegar a segunda vuelta.
Opinión similar tiene Rodrigo Arellano, vicedecano de la Facultad de Gobierno UDD: “Debe impedir fuga de votos a Kast sumando rápidamente a la UDI. No perdería ningún minuto intentando sumar los votos de Kast, ocuparía todo el tiempo en impedir que votos de Lavín o gente de la UDI se vaya a Kast”.
A ello añade que Sichel debería acercarse “rápidamente” a los partidos políticos e incorporar a su equipo a “personas claves y aglutinadores”, además de tomar liderazgo a nivel parlamentario para encontrar cartas de sus huestes que puedan competir y apoyarlo desde ahí.
Para Izquierdo “Sichel tiene una tremenda oportunidad de poder conglomerar a todos los partidos de CHV y los independientes que se involucraron. Pero va a depender de si su liderazgo va a ser capaz de atraer mas personas”.
Agrega que “no están las condiciones para que CHV reste adherentes. Al contrario, necesita sumar más votantes. Necesita los votos de todos los partidos e incluso más votos para ganar la presidencial”.
Para ello, dice Munita, se puede apoyar en el concepto de “derecha social”, el mismo que fue usado por el senador Manuel José Ossandón y luego por el –hasta ayer- precandidato presidencial Mario Desbordes. “Es una derecha de centro, preocupada de temas más sociales. Una derecha más humana, solidaria, cercana al capitalismo compasivo. Es la idea de salvar al capitalismo de los capitalistas. Entender que el capitalismo requiere una mirada más humana. Sichel debería seguir ese camino, seguir abordando temas como la economía circular; una economía preocupada del medioambiente. Son temas cómodos para él porque la izquierda tiene menos compromiso con el desarrollo económico”, explica.
