El Panel Ciudadano de la UDD realizó una encuesta para tomar el pulso a la próxima contienda electoral por la Gobernación Regional Metropolitana. Entre sus resultados da cuenta de la irrupción del conocido doctor Sebastián Ugarte, quien, si bien no ha expresado fehacientemente su interés de postular al cargo, fue medido en el sondeo.
El médico tiene una alta repercusión pública al ser un especialista recurrentemente consultado por los canales de televisión para referirse al control de la pandemia. Por su expertise, el intensivista y jefe de la UCI de la Clínica Indisa es una fuente ampliamente requerida por los medios de comunicación. Podría ser en ese contexto que en un escenario de virtual participación irrumpe alterando las preferencias.
De igual modo, el exministro Claudio Orrego (DC) también se perfila como otra de las personalidades más competitivas, según los análisis realizados por la medición (ver infografías). En cuanto a su metodología, la ficha técnica del sondeo obtuvo una “tasa de respuesta de 1.004 casos, que corresponde a margen de error 3,2% a un 95% de nivel de confianza. Encuesta realizada entre las 13:00 horas del martes 1 de diciembre y las 18:00 del miércoles 2 de diciembre de 2020”.
La aplicación de la medición se da después de la realización de las primarias legales para gobernador de la Región Metropolitana. Entre otros resultados, Orrego fue elegido en la contienda inscrita por el pacto Unidad Constituyente que integran las colectividades DC, PPD, PS, Ciudadanos, PRO y los radicales. El también exalcalde se impuso a Helia Molina y Álvaro Erazo. Todos ellos competían por el mismo sector. En tanto, Karina Oliva triunfó en la primaria a gobernadora metropolitana organizada por el Frente Amplio.
De esa forma —señalan los resultados de la encuesta—, una opción incluía a Orrego, Karina Oliva y Cristián Labbé Martínez (UDI), siendo las preferencias 18%, 12% y 9%, respectivamente, con un 61% de respuestas “ninguno”. Se observa allí que el porcentaje de hombres que declaran que votarían por Orrego es significativamente más grande que en el resto de los otros candidatos.
Por otra parte, en el grupo etario 18-30 años la opción “ninguno” alcanza el mayor porcentaje (66%), lo que contrasta con el 52% entre los mayores de 60 años. En el segmento jóvenes, Oliva alcanza su porcentaje más alto (17%), superando, incluso, a Orrego. En el caso de Orrego y Labbé, su mejor rendimiento está entre los mayores de 60 años, 13% y 24%, respectivamente.
Mientras, por nivel socioeconómico se aprecia que Orrego exhibe mayores preferencias en los sectores ABC1 y C2 (27% y 21%) respecto del total de preferencias por él obtenidas (18%). Además, se trata de sectores socioeconómicos en que el porcentaje de “ninguno” es significativamente menor, 38% y 50%, respectivamente. Cabe destacar que en los sectores socioeconómicos D y E, las preferencias por todos los candidatos caen de manera importante, y la opción “ninguno” registra 76%.
Además, en una segunda pregunta se agregó a Pablo Maltés, quien generó un movimiento marginal y no significativo de un punto porcentual de las preferencias por algunos candidatos, e incluso redujo marginalmente la opción “ninguno” de 61% a 59%. En concreto, las preferencias para Orrego, Oliva, Labbé y Maltés fueron 18%, 11%, 8% y 4%, respectivamente.
Otro dato considerado relevante sobre los efectos que tienen en las preferencias de las personas —por lo demás, bastante estudiado— es la introducción de más opciones. En efecto, si bien estas son marginales en el total, como se señaló, al analizar las preferencias por grupo etario Orrego aumenta en 4 puntos porcentuales en el grupo 61 y más, vale decir, de 24% sin Maltés a 28% con dicho candidato en competencia. Si bien en el resto de los grupos etarios se producen movimientos, estos son menores.
En un tercer escenario se incorporó la figura de Hernán Larraín Matte, quien obtiene un 8% de las preferencias, pero no altera los resultados de los otros candidatos de manera significativa, aun cuando la opción “ninguno” aumenta marginalmente en 2 puntos porcentuales y Orrego y Oliva disminuyen un punto porcentual cada uno.
Asimismo, en otro escenario se incorporó a Maltés, no apreciándose cambios significativos, aun cuando sí hubo algunas disminuciones, pero marginales. Pero al incorporar al doctor Ugarte, las preferencias se alteran: Orrego obtiene un 16%, Ugarte un 15% y Oliva un 10%.
Ahora bien, proyecta el estudio, cuando se incorpora a Maltés como en los otros escenarios, Ugarte se hace más competitivo e incluso supera a Orrego —18% versus 15%—, lo que podría estar siendo explicado por la disminución de la opción “ninguno”. En efecto, se aprecia que esta opción disminuye en a los menos 7 puntos porcentuales respecto de los otros escenarios.
Sobre otra materia importante de la medición, en general los distintos escenarios muestran que la opción “ninguno” varía entre 63% y 53%, “dejando en evidencia que la competencia recién comienza, y en los próximos meses veremos cambios significativos”, concluye la encuesta. Y añade que “es probable que en gran medida dicho porcentaje de ‘ninguno’ corresponda a personas que tienen menores disposiciones a participar en las próximas elecciones”.
Si bien aún no inician las campañas para gobernador regional, las cifras del sondeo UDD podrían dar cuenta de una situación particular al observar la mayor inclinación de los consultados a responder que votarían por “ninguno” de los eventuales candidatos presentados. El estreno de la elección por votación popular del próximo jefe regional podría explicar quizá menor conocimiento de estos comicios; sin embargo, igual obligará a redoblar los esfuerzos de propaganda y difusión para lograr alta participación ciudadana. Sobre todo, cuando se requiere del respaldo del 40% de los votos emitidos para ganar en primera vuelta.
Todo eso se resolverá en poco más de cuatro meses, cuando tenga lugar la elección de gobernadores regionales, el 11 de abril de 2021.
