Repercusiones trajo la última sesión de la comisión de Economía de la Cámara de Diputados en la que el Fiscal Nacional Económico delineó las consideraciones que tendrán a la hora de analizar la operación mediante la cual la firma estatal china State Grid busca quedarse con los activos de CGE.

En esa misma instancia los diputados alertaron sobre los riesgos de que gran parte de un negocio estratégico como el de la distribución eléctrica quede en manos de estatales chinas.

Esos comentarios fueron advertidos por cercanos a los empresarios de ese país como una animadversión hacia ellos, previendo los posibles efectos que esto podría generar.

“Lo que está pasando es que los empresarios chinos vienen, respetando la ley, pero lo que preocupa es que hay un sentimiento antichino que está surgiendo y eso puede ser perjudicial para nuevas inversiones”, comenta el director del Centro de Estudios de Relaciones Internacionales de la UDD, Yun-Tso Lee, quien añade que entre los empresarios de ese país ya está circulando cierta incertidumbre por el cambio constitucional que se avecina.

En esta línea, el comisionado internacional de la Cámara de Empresas Estatales Chinas en Chile, Carlos Salazar, apunta a que existe desconocimiento respecto a cómo opera la Sasac, entidad encargada de supervisar los activos chinos por el mundo.

“Esta comisión está obligada, precisamente, a supervigilar la eficiencia de las empresas estatales, incluida la competencia entre ellas cuando así ocurra por el devenir económico de cada corporación. Hay distorsión o miopía cuando se dice que Sasac es ‘como un grupo económico’ porque se aplica un patrón de análisis del capitalismo occidental al rol y al peso del capital en el socialismo chino. Y no es lo mismo”, dice Salazar.

Este último punto jugará un rol clave en el análisis que realice la Fiscalía Nacional Económica sobre la operación, pues el persecutor ya confirmó que se tendrá en consideración a todas las empresas que están bajo la supervisión de la Sasac a la hora de analizar la transacción.

Otro cercano a los empresarios chinos es el exembajador chileno en China Fernando Reyes Matta, quien sostiene que a los inversionistas les llama la atención que nadie los ha convocado para debatir programas a mediano y largo plazo, en donde puedan compartir su visión de negocios pensando en la próxima década.

“Ellos vienen sabiendo que aquí hay dos objetivos aún pendientes: dar seguridad y calidad al servicio, es decir, todo el tema de la portabilidad, y una reformulación en las tarifas en beneficio del consumidor. State Grid llega con una fuerte experiencia en Brasil y convertida en la quinta empresa de este carácter en el mundo”, explica Reyes Matta.

Es por eso que Yun-Tso Lee destaca que, sobre todo en el momento actual, es clave mejorar las relaciones y advierte que el mercado chileno no es tan importante como el estadounidense, ni siquiera se asemeja a las grandes orbes del gigante asiático. “En un momento de crisis como ahora es preocupante; tenemos que generar acciones promercado y desarrollo; el próximo año será complicado por la pandemia y la Constitución, entonces no hagamos más acciones que puedan espantar a inversiones chinas”, comenta.

Longyan Shen, directora de Negocios del Asia Desk de EY Chile, coincide en que el clima actual se debe al desconocimiento que existe en el país sobre China.

“Veo una diversificación de negocios chinos, luego de los españoles e italianos; es una señal de que aquí vienen los chinos, lo que significa más competencia en el mercado local, con mejor calidad y mejores productos. Pero siempre que no se conoce algo, hay mayor inseguridad, por eso estamos viendo cómo podemos adaptarnos a la inversión china”, asegura.

La Fiscalía Nacional Económica manifestó el lunes en el Congreso que tendrá en consideración a todas las empresas que están bajo la supervisión de la Sasac (encargada de supervisar los activos chinos por el mundo) a la hora de analizar la compra de CGE por parte de la china State Grid. Reinhold Moller