Encuesta reveló que hay hasta un 55% de probabilidad de que el mandatario repita en el cargo, ad portas de las primarias.
“Una vez que el presidente Mauricio Macri se reelija y se continúe con el proceso de cambio, vamos a crecer”. Así de tajante fue el ministro de Hacienda argentino, Nicolás Dujovne, tras la última revisión del Fondo Monetario Internacional (FMI) en que redujo la proyección de crecimiento de la economía de 2020 hasta 1,1%.
Los electores estarían alineados con el funcionario. La aprobación del jefe de Estado subió a 34% en junio, frente al 28% de mayo, según cifras de Poliarquía, una de las principales encuestadoras del país.
La firma local Synopsis, en tanto, reveló que existe entre un 50% y un 55% de probabilidades de que sea reelecto, ad portas de las primarias (PASO) del 11 de agosto. Eso sí, el resultado estaría condicionado por la estabilidad del peso argentino y la inflación.
“El mercado está comprando gradualmente (la idea de que) el impulso continuará con Macri”, dijo Alejo Costa, jefe de estrategia de BTG Pactual, explicando que la última revisión positiva del banco -frente a una postura más tímida sobre el país- es un “buen ejemplo de cómo se siente el mercado”, consignó Financial Times.
Todo esto mantendría optimistas a los oficialistas, pero no es suficiente para cantar victoria. El Índice de Confianza en el Gobierno (ICG), realizado por la Univesidad Torcuato Di Tella, mostró un repunte durante julio, ya que alcanzó 1,97 puntos: un aumento de 6,1% respecto del mes anterior.
Sin embargo, Morgan Stanley estima que esto no asegura la reelección y que el indicador debe superar los 2 puntos para aclarar el panorama.
La universidad mantiene la línea de la firma y agrega que “los niveles actuales del ICG son similares a los obtenidos durante el gobierno de Cristina Fernández en octubre de 2013 (1,98) y de 2015 (1,91), que coinciden con derrotas electorales del partido en el gobierno”. El informe también dice que “el valor actual del ICG se ubica 10% por encima del obtenido durante el último mes de la administración de Fernández”, con 1,80 puntos en diciembre de 2015.
Considerando la última cifra, la confianza se muestra estable desde mayo, lo que apunta a un incremento trimestral acumulado de 28,8%, según Clarín.
Factor Empresarial
En el último tiempo, el mercado y las empresas han tomado un rol preponderante en el desarrollo de la política. Y es que los intereses de los privados han demostrado mover la aguja durante las campañas presidenciales.
“A medida en que avanzaba la posibilidad de Cristina de volver a la presidencia, el mercado empezó a huir, se aceleró la corrida cambiaria, y volvía a desestabilizar todo”, dijo Marina Dal Poggeto, directora ejecutiva de la consultora argentina, EcoGo a DF.
Agregó que “la apreciación del tipo de cambio nominal, que ayuda al proceso de desinflación y mejora el consumo a corto plazo, es una señal de estabilización fuerte”.
“El escenario económico actual tiene un rol relevante, y en ese juego, Macri quizás no es tan fuerte como hace cuatro años, porque ya tuvo una prueba de fuego que fue débil”, dijo el analista político de la Universidad del Desarrollo, Rodrigo Arellano.
Sin embargo, agregó que el actual mandatario “no tiene el factor ‘corrupción’ que tiene Cristina Fernández”, lo que podría beneficiarlo.
El analista político internacional de la Universidad Adolfo Ibáñez, Guillermo Holzmann, concordó con Arellano y agregó que “el discurso de las empresas se orienta a los indecisos, para inclinar la balanza al candidato que aporte al mercado”.
Añadió que esta fase se transforma y finalmente se refleja en el movimiento de las bolsas: “Es un termómetrro muy sensible respecto a las expectativas y, de esa manera, empieza a condicionar las inversiones próximas a las empresas, con el valor de las acciones”.