Mathias Pavez es alumno de segundo año de Ciencia Política y Políticas Públicas que viene llegando de un primer semestre de intercambio en la Universidad Hradec Králové en República Checa, y nos cuenta de su experiencia.
¿Cómo llegaste a la Universidad del Desarrollo y por qué elegiste esta carrera?
Entré en la UDD porque fue la única que me abrió las puertas de par en par y estoy muy feliz porque la calidad de los docentes y de educación es muy buena. Yo salí del Liceo Augusto d’Halmar y para nosotros, a pesar de tener muy buenos puntajes en la PSU, nos va muy mal en el NEM y el Ranking. En la Universidad del Desarrollo, desde tercero medio, me ofrecieron cursos, impulsando y apoyando mis estudios. Pude ir a algunas charlas y conocí profesores de la carrera, me hablaron personalmente, tomaron el tiempo de orientarme y eso se los agradezco un montón, porque al final gracias a ellos encontré mi vocación. Además tengo becas de la UDD y estatales, que me permiten estudiar casi gratis, o al menos sin preocupar a mis padres.
¿Cómo llegaste a irte de intercambio?
Si no tenía el dinero para pagarme la carrera, menos lo tenía para irme a estudiar fuera pero la Dirección de Relaciones Internacional y mi facultad me apoyaron siempre, sin ellos no habría podido irme. Finalmente, la coordinadora de mi carrera me habló de la beca de Hradec, que incluía todo, era perfecta para mí. Supe de esta beca y se me iluminó la cara, tenía tres días para postular así que corrí, moví cielo, mar y tierra. Yo nunca había salido del país. ¡Primera vez que salgo de Chile y me voy a Europa más encima! Nadie lo podía creer, sobre todo en mi familia.
Si bien para mí el país no fue una opción, yo fui encantado. E irónicamente República Checa, al menos en esta carrera, es muy acertado. Como politólogo creo que lo más importante es tener un enfoque distinto de nuestra carrera, allá uno ve otra realidad y se da cuenta porqué copiar políticas públicas de afuera y aplicarlas en Chile, no siempre funciona. A mí no me queda más que agradecer, la UDD me dio la oportunidad de estudiar, de viajar por toda Europa y de conocerme a mí mismo, de crecer como persona.
¿Qué es lo que más destacarías de tu experiencia?
Principalmente dos cosas. La primera es la capacidad de poder ver tu carrera desde otro punto de vista. Estudié los mismos autores que tenía aquí, pero con una perspectiva totalmente diferente, es realmente impresionante y enriquecedor poder leer el mismo libro con dos visiones muy distintas. La segunda son las personas que conocí, las amistades y los contactos que me hice. Tuve la posibilidad de compartir con gente de todo el planeta y me siento tremendamente agradecido. Ahora tengo amigos abogados, cientistas políticos, ingenieros y economistas a lo largo del mundo, personas con quienes sé que puedo contar a nivel personal y profesional. Además, aprendí más del modelo europeo pero también de mi país. Tuve la posibilidad de arrancar, de ver Chile desde afuera y de compararlo con el mundo. Eso se lo agradezco enormemente al intercambio porque sin esto, no tendría las ganas de seguir estando aquí, de seguir luchando para mejorar el país. Todo el mundo decía que no iba a querer volver, pero es todo lo contrario, volví con más ganas, y puedo seguir con más convicción en esta carrera que amo, y con más certeza respecto a mi futuro profesional.
¿Incentivarías a los estudiantes de tu carrera a irse en intercambio?
¡Completamente, sin dudarlo un segundo! El intercambio es una de las mejores oportunidades que uno tiene en la vida para crecer personal y profesionalmente. Es algo muy importante y además no significa atrasarse en la malla. Al final es simplemente una experiencia ganada, es enriquecedora desde cualquier punto de vista y honestamente es lo mejor que me ha pasado hasta ahora en la vida.
¿Qué podrías decir sobre tu carrera?
He ido buscando mis aptitudes pero no fue fácil porque en el liceo me gustaban todos los ramos y tenía ese problema de saber para qué soy bueno si me gustan todas las áreas. Finalmente la política lo abarca todo así que es ideal. Y sé que hay muchos jóvenes que están buscando un Chile mejor, que todavía tenemos sueños y soñar no es malo, no hay que dejar de hacerlo. Creo que estos jóvenes son líderes, son aquellos que buscan aprender de ciencia política y lograr implementar políticas públicas para mejorar el país.