SEÑOR DIRECTOR
Después de 60 años, la política lleva a la derogación de la ley del cobre y propone un sistema de financiamiento pluria-nual de las FF.AA. y misiones como empleo en emergencias, catástrofes, y otras acciones distintas a la guerra.
Muy interesante el discurso que se propone y concordando con la modernización del sistema de financiamiento de un poderoso sistema de Defensa que ha permitido más de un siglo de paz. Sería interesante conocer ¿cuáles la propuesta para la fuerza?, ¿qué se quiere hacer?, ¿qué es lo que la política quiere hacer al cambiar un sistema de financiamiento?, ¿cuál es la misión que se entrega a la fuerza militar? El aparato militar estaba diseñado y adaptado al financiamiento que había; hoy se ha escuchado de todo, pero nada a firme que permita entender cuál es la misión que se entregará a las FF. A A. con un nuevo sistema de financiamiento.
¿Se habrán definido las amenazas?, ¿se habrá proyectado el escenario aun par de años más? Se habla de operaciones distintas a la guerra, lo que en el mundo actual parece perfecto, pero, históricamente estas instituciones siempre han participado en emergencias, catástrofes, campañas de educación, implementación de políticas de sanidad, marcar la presencia del Estado en regiones aisladas, etc., pero lo que no hay que perder de vista es la esencia de las FF.AA., y para qué están diseñadas.
Definamos primero el objetivo nacional (no de gobierno), de ahí derivamos la misión, y luego implementamos el financiamiento para diseñarla fuerza que cumpla esa misión. Toda esta última parte es la que no se conoce.
Jorge Sanz J. Académico Facultad de Gobierno UDD