Este domingo el Pleno del Comité Central del PS intentará proclamar a su candidato a las primarias del 2 de julio, que saldrá entre Ricardo Lagos y Alejandro Guillier. La decisión marcará el inicio del período de Álvaro Elizalde como líder de la colectividad, y ya enfrenta al menos tres frentes de presión. Uno, la advertencia DC de que podría llevar a Carolina Goic a primera vuelta si el PS opta por el senador, lo que conformaría un escenario «todos contra» la jefa falangista en la primaria. Dos, el laguismo exige que la votación no sea secreta y avisa que si el partido no proclama al ex presidente, éste podría bajarse de la carrera. Y tres, el riesgo de conceder ‘libertad de acción’ a los socialistas del bando que resulte perdedor, lo que podría alimentar la indisciplina interna.
Cuatro especialistas en la teleserie PS calibran cada uno de estos flancos.
Carolina Goic desecharía primaria si el partido proclama a Guillier
La «advertencia» de la DC, su flanco más delicado
«Lo más complicado para él es responder a las presiones de la DC, que lo ponen en una situación imposible al insinuarle que si respaldan a Alejandro Guillier podrían no ir a primarias, lo que implica romper la coalición», sentencia el académico de la Universidad de Chile, Alejandro Olivares. «Yo me tomaría muy en serio la amenaza de la DC de ir a primera vuelta, ayer Andrés Zaldívar lo dejó entrever, que la DC no va a aceptar una primaria en que todos estén contra ellos. Es el flanco más complejo», advierte el ex director de la Secretaría de Comunicaciones del gobierno, Carlos Correa. Para Miguel Ángel Fernández, (Universidad del Desarrollo), «Elizalde debiese poner más atención y solucionarlo de mejor manera, sin la DC la NM no existe. Es más arriesgado proclamar a Guillier, porque si proclaman a Lagos el guillierismo en el PS quedará dolido, pero igual seguirá teniendo mejores opciones en la primaria». Pero Kenneth Bunker (U. Central) cree que «el PS no tiene mucho que hacer; la DC tomará sus decisiones de manera autónoma».
Sector del ex Presidente advierte que podría bajarse
Bunker: «La más fuerte es la presión del laguismo»
«La presión más fuerte que enfrenta es la del laguismo. Si el voto fuera secreto, creo que ganaría Guillier, pero si es a mano alzada, muchos miembros del Comité Central no se atreverán a respaldarlo y el resultado se inclinará por Lagos. No sé si Elizalde logre navegar con éxito esas aguas», hace ver Bunker. Pero Max Colodro cree que «lo único que evidencian las presiones del laguismo son las debilidades de la candidatura de Lagos y la incertidumbre en el PS. Es una señal de debilidad más que de fuerza», evalúa Max Colodro. Más allá de eso, dice que «el mayor riesgo para el PS es pasar a la historia como el partido que le puso la lápida a la carrera política de Ricardo Lagos, y la única forma de dejarlo contento es proclamarlo». Correa es tajante al responsabilizar de eso a Máximo Pacheco: «La presión del jefe del comando de Lagos será contraproducente, él sigue pensando más como gerente que como político».
Partido no sancionaría quienes apoyen a otro candidato
Colodro: «Libertad de acción mostraría debilidad»
«En el escenario de una eventual libertad de acción, la mesa de Elizalde asumirá en un cuadro de debilidad e incapacidad de ordenar al partido», subraya Colodro. Él piensa que «sería una mala decisión para el PS y su institucionalidad que se asentara la lógica de la libertad de acción». Olivares disiente y aclara que «las otras presiones no son tan graves, porque el PS está acostumbrado a votar a mano alzada en varios órganos y porque todo se puede solucionar negociando». Y Correa, ex PS, hace un punto: «Si ambos grupos, guillieristas y laguistas, están de acuerdo en no sancionar al otro, si pactan una especie de armisticio», podría resultar. De cualquier modo, dice que ante todo el mapa ya descrito, «Álvaro Elizalde sabe convencer, está rodeado de personas capaces, y tendrá que hacer uso extremo de sus proverbiales habilidades blandas para eso».