El académico de nuestra facultad, José de la Cruz Garrido, escribió una carta al director
Señor director:
El juez Daniel Urrutia se ha convertido en un peligro público por donde se lo mire, lo que sumado al escándalo de los autos Lexus para los ministros de la Corte Suprema, nos obliga, como ciudadanos, a exigir que el Poder Judicial revise sus estándares de servicio público.
En la crisis de seguridad que se vive, incluyendo el mayor incendio intencional con resultado de muerte de la historia, el vacío de poder es evidente.
La función de la justicia, su independencia y su estándar ético, no pueden quedar expuestos constantemente a la duda razonable de una ciudadanía cansada de los abusos de la autoridad.
La sensación de que este orden democrático no da el ancho frente al crimen organizado y la corrupción que tiene capturado al Estado es cada vez más fuerte.
Los resultados son conocidos.
Se hará cada vez plausible una salida autoritaria, ya que la ciudadanía abrazará una alternativa de mano dura.
Hay datos que ya validan hace años esta posibilidad.
Esperemos que la máxima autoridad judicial se tome en serio que entre sus funcionarios hoy hay jueces que defienden los intereses de los criminales.
José de la Cruz Garrido – Políticas Públicas UDD