Tres de los nuevos ministros, todos provenientes del Congreso, una vez llegados al gabinete han refrendado cómo votarán en el plebiscito de octubre: Mario Desbordes (RN) por el Apruebo y Andrés Allamand (RN) y Víctor Pérez (UDI) por el Rechazo. En la práctica, sus declaraciones fueron corriendo el cerco inicialmente establecido por La Moneda, en cuanto a mantener una prescindencia total y expresar un discurso solo apegado a lo que es un plebiscito «seguro y participativo». Sin embargo, fuentes del oficialismo cuentan que finalmente esta mañana el Presidente Sebastián Piñera, en reunión con el comité político, zanjó la situación y estableció que el criterio continuará siendo de prescindencia, pero sin impedir que sus colaboradores expresen sus posturas. Pues, por lo demás, ya se sabe la opción de bastantes integrantes del gabinete.

La complejidad es que mientras más ministros se tomen la libertad de hablar, mayor será la presión para que el Mandatario dé a conocer cuál es su postura, sobre la cual muchos especulan. Especialmente cuando dentro de su gobierno unos abogan para que La Moneda se mantenga neutral, otros para que se suba rápido al Apruebo (pensando en que se confirmaría la goleada que advierten las encuestas), y otros que defienda el Rechazo que prima en Chile Vamos.

Una segunda duda: hasta esta mañana no estaba claro cuál es el límite de esa «prescindencia opinante» o transparente, en caso de que los ministros pudieran manifestarse por una opción en sus tiempos libres y obviamente partiendo de la base de que nadie está hablando de usar recursos públicos. Pero, de acuerdo a las mismas fuentes consultadas por este medio, en la reunión de hoy se habría establecido que nadie haga campaña y que es momento de dedicarse a gobernar.

“A mí me gustaría que tuviera una postura en donde esté la mayoría de la gente de su sector”, expresó sobre Piñera la senadora Jacqueline van Rysselberghe, presidenta de la UDI (ver entrevista). En tanto, para el timonel RN, Rafael Prohens, si bien “es el Presidente de todos los chilenos”, cree que “él debe tener presente que está sentado en La Moneda porque hay un sector determinado que lo apoyó. Y ese sector hoy día tiene una postura mayoritaria. Si él quisiera pronunciarse, debiera ser por esa opción”. De todos modos, dijo que “debiera darle libertad de acción a todos sus ministros y subsecretarios porque ellos son pertenecientes a partidos políticos y pueden tomar posiciones como un militante más del partido”.

En Evópoli, su timonel, Andrés Molina, matiza: “A mucha gente le interesa que el Gobierno tenga postura sobre todos los temas, pero en este (caso) está comandado por gente que tiene todas las posturas. No sería lógico que tomara postura”. Quien no matizó fue el senador gremialista Iván Moreira: “Si el Gobierno no se define por el Rechazo, tendrá que asumir su responsabilidad en la derrota en el próximo plebiscito. Chile Vamos mayoritariamente está por el Rechazo y tenemos que ser un contrapeso frente a una izquierda que va a cambiar absolutamente toda nuestra Constitución”.

¿Qué debe hacer el Presidente?

“Se hace el loco”, bromea Molina en referencia a cómo el Presidente ha eludido inclinarse por una postura.

Para Eugenio Guzmán, decano de la facultad de Gobierno UDD, mantenerse al margen es un acierto: “No sé por qué opción esté el Presidente. Elucubrar es enredar el asunto. Creo que va a haber mucho cuidado de plantear estos temas y va a mantenerse por arriba”. Algo que atribuye a que “la oposición lo único que espera es que se cometa un error en esa dirección, para decir ‘¿ve?, le dijimos que era el gabinete del Rechazo’”.

Pablo Ortúzar, investigador del IES, opina que “sería sano que el Presidente asumiera abiertamente una postura republicana, de asegurar condiciones fundamentales para un plebiscito seguro y pacífico para todos los ciudadanos, en vez de predicar la famosa ‘neutralidad’ o ‘prescindencia’, que carece de causa y épica”. Añade que “desde la postura republicana, además, puede exigir a sus ministros que, estén por el Apruebo o por el Rechazo, muestren altura, ejemplaridad y decencia ciudadana al opinar sobre el tema. El republicanismo es una forma de tomar posición. Una forma digna, decente y democrática de hacerlo”. Incluso, señala que él “puede explotar a su favor el polo responsabilidad republicana/irresponsabilidad facciosa, convirtiendo su legado en la concreción de un plebiscito pacífico y seguro, sea cual sea el resultado. Eso no es neutralidad: es republicanismo”.

Cristóbal Bellolio, académico de la Escuela de Gobierno de la UAI, cree que la neutralidad es una opción válida y que “no es contradictorio que los miembros del gabinete tengan opinión personal pero que el Presidente mantenga una cierta prescindencia, tal como suele tenerla en el resto de las elecciones”. Estratégicamente, piensa que “si a Piñera le gana el olfato y el oportunismo, va a terminar votando por el Apruebo. (Aunque) no creo que lo haga, porque debe estar muy dolido, por lo que pasó en octubre”. Incluso Bellolio dice que “no encuentro tan dramático ver a Desbordes un domingo en la mañana haciendo actividades por el Apruebo o a Allamand por el rechazo (…) Los ministros en su espacio privado, en sus tiempos libres, no tienen ningún problema”.