Como panelista del matinal de Chilevisión, donde hizo contrapuntos con la diputada Pamela Jiles (PH), debutó esta mañana el senador Manuel José Ossandón, cada uno sentado a un extremo del panel. El rol televisivo del parlamentario en un espacio que aborda una amplitud de temas mucho más allá de la política —desde la seguridad de la frontera, a propósito de la muerte de Sebastián “Cangri” Leiva, hasta el juicio a Sergio Jadue por pensión alimenticia— había sido antecedido por sus duras declaraciones del viernes, que hicieron recordar al Ossandón de la primaria presidencial 2017; aquel que solía tener como frente de críticas a Sebastián Piñera y que estuvo más bien dormido durante el primer año de gobierno.
Pero también coincide con el “despertar” crítico de otras potenciales candidaturas oficialistas (ver recuadro).“Si no le gusta, bueno, tendrá que tomarse un diazepam, si la cuestión es clara.
Yo voy a decir la verdad”, indicó Ossandón el viernes en radio Universo. El motivo de su frase era el llamado a la “lealtad” que el Mandatario hizo a Chile Vamos la noche del miércoles 13 de marzo, el mismo día en que se había publicado en La Tercera la entrevista en la que el senador aseguró que el actual gobierno sería “un fracaso” si no entrega la banda a otro candidato del sector.
La semana previa, Ossandón había acusado al ministro de Economía, José Ramón Valente, de hacer un “tremendo lobby ” para que diputados modificaran el proyecto de su autoría sobre responsabilidad de fraudes bancarios en uno “orientado a perjudicar a los clientes, cobrándoles por las fallas de los bancos”, algo “indignante”, dijo. Con las alertas encendidas en Evópoli y la UDI, mediante un comunicado los gremialistas lo acusaron de intentar “ganar puntos en encuestas cuando en ellas ya perdió protagonismo (…).
Está logrando algo que parecía impensado, ser el principal referente de la oposición cuando ella, en la práctica, no existe”.
¿Anti-Piñera?
Para Rodrigo Arellano, Vicedecano de la Facultad de Gobierno UDD, “volvimos a ver al Ossandón de la primaria”, que para re posicionar su opción a La Moneda necesita “un rol que lo distinga. Está jugando a ser un legislador con el estilo confrontacional que le dio crédito”.
Eso sí, puntualiza, “más que un Ossandón anti-Piñera, está dispuesto a enfrentarse a quien sea para poder enganchar con las demandas de la clase media…”.
Añade que, por lo que se observa, “entendió que si quiere recuperar terreno contra otros nombres que han podido capitalizar un discurso y un actuar político que engancha con la clase media, (el camino) es volver a criticar a las instituciones más poderosas, en este caso, los bancos”.
Tomás Duval, experto electoral RN, señala que “en el primer año, Ossandón cumplió su palabra y apoyó lealmente al Gobierno, tal como lo anunció en la segunda vuelta electoral”, pero que también “perdió terreno”. Y que siendo su desafío llegar a la primaria del oficialismo el 2021, “este año debe tomar decisiones estratégicas para perfilarse, definir cuál va a ser su accionar dentro de Chile Vamos”. Así, asegura: “El primer error sería volver a la estrategia anterior de decir ‘el Gobierno está malo, malo, malo’, porque va a quedar enterrado en un nicho”. Para el analista, “ahora es absolutamente al revés: tiene que irle bien al Gobierno para que él pueda tener éxito”.
“El senador tampoco puede volver al Ossandón 2010 al 2013”, insiste Duval, pero no sólo por las críticas, sino porque “va a tener que avanzar más allá” de su discurso de la derecha social; “tiene que mostrar una capacidad de ser Presidente, tener una visión de Estado”. Y remarca que “se encasilló mucho en la zona geográfica Región Metropolitana, y específicamente en Puente Alto y sus alrededores. Hay que salir de ahí”. Aunque a mediados de 2018, el senador se desplegó con una serie de talleres a autoridades regionales, lo que generó tensiones especialmente con la UDI, el analista dice “no era el tiempo. Le faltó prudencia”.
Lavín y Kast a la vista
El senador RN está en un pie distinto a como enfrentó la primaria, más bien estancado en las encuestas de opinión. Mientras otras figuras han ganado terreno, como Lavín —quien ya era figura habitual del matinal de Canal 13—, cuyo despegue ha sido abordado con inquietud en Renovación Nacional, y el ex diputado José Antonio Kast, apoyado abiertamente por un grupo de parlamentarios de la colectividad, en torno a un discurso valórico que ha activado una derecha más dura, consistente desde la pasada primera vuelta presidencial. En el sondeo Criteria Research de febrero, Ossandón no apareció como potencial carta para suceder a Piñera al tener una mención menor a un 2% —en modalidad pregunta abierta—, en circunstancias que Kast se posicionó con 11% y el alcalde, con 9%.
Y en la última CEP (diciembre de 2018) Ossandón marcó 64% en conocimiento, 21% de valoración positiva y 31% negativa; una baja de cinco puntos de conocimiento respecto de fines de 2017, y de cuatro puntos en su valoración positiva, aunque también bajó en 10 puntos en la negativa.“Hoy hay una derecha más populista de (José Antonio) Kast, y un alcalde UDI levantado, que está tomando muchos temas que aparecían producto del propio Ossandón, como si hubiesen sido una novedad, me refiero a la integración social. Hay un escenario muy importante hacia el centro, que es donde se puede jugar la elección”, dice Duval.
Sostiene que durante 2018, a Ossandón “le faltó un poquitito de astucia de haberse apropiado de los temas que él mismo propuso”.
Ximena Ossandón, diputada RN y hermana del senador, cree que los dichos del Cote son necesarios y que faltó autocrítica con motivo del primer año de gobierno.“Sé que la primera impresión puede haber sido ‘el fuego amigo empezó’. Pero al verlo más en profundidad hay una forma de hacer un diagnóstico y de comunicarlo”, dice la diputada. Agrega que “el Gobierno partió muy bien con el sello social, pero lo ha ido perdiendo. Hemos vuelto a caer en los temas de una derecha económica, contando, con justa razón, cómo ha ido mejorando nuestra economía, pero eso no lo sienten las familias chilenas”.
El senador RN también justifica sus intervenciones: “La política se ha ido desprestigiando en el tiempo, porque los políticos mienten. Me llamaron muchas personas para decir que estaban de acuerdo con lo que dije.En privado dicen otra cosa”.El círculo de asesores directos del senador también cambió.
Samuel Valenzuela, historiador que lo acompañó por cinco años, renunció a su cargo —su salida, dicen, habría sido de común acuerdo— y el rol estratégico que cumplía lo lleva ahora a cabo el periodista Gonzalo Escobedo, a quien el “Cote” conoce desde que era alcalde de Puente Alto. También se sumó al equipo hace un par de semanas la periodista Paula Flores, quien trabajaba con el diputado UDI Jorge Alessandri y que se encargará de las redes sociales y la relación con la prensa.