SANTIAGO.- Este miércoles a las 15:30 horas, la sala del Senado determinará el futuro de la postulación de la jueza de la Corte de Apelaciones de Santiago, Dobra Lusic, a la Corte Suprema, cuya nominación ha sido cuestionada por las gestiones que habría realizado para favorecer el nombramiento de John Campos como notario interno.

Ese hecho, junto a una serie críticas a algunos de sus fallos, motivó a los senadores del PPD a anunciar su rechazo anticipado, mientras que desde el PS y la DC anunciaron que reevaluarían su apoyo a la magistrada. Pese a ello, el Gobierno decidió mantener a Lusic como candidata, buscando endosar la responsabilidad a la oposición.

En ese escenario, sumando la solicitud que hicieron al Ejecutivo la presidenta de la UDI, Jacqueline Van Rysselberhe, y el senador Felipe Kast (Evópoli) para que diera pie atrás, la elección de Lusic se ve compleja. Sin embargo, no está claro quien asumirá el costo político del rechazo.

Ello, considerando que en el Senado, donde la oposición tiene mayoría, rige un acuerdo político tácito de llenar las vacantes del máximo tribunal con un criterio de alternancia entre Chile Vamos y la ex Nueva Mayoría, siendo en esta oportunidad el turno de un cupo de centroizquierda, lo cual pondría la responsabilidad en ese sector.

Sin embargo, desde ese bloque han apuntado al Gobierno, ya que fue el propio Presidente Sebastián Piñera quien tomó la decisión de nominar a Lusic. A ello se sumó el respaldo que le dio en su momento el ministro de Justicia, Hernán Larraín, quien aseguró que la jueza le daría mayor equidad de género al Poder Judicial.

Ante esos antecedentes, el Decano de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo, Eugenio Guzmán, comentó que “lo que está pasando con la política chilena es de tensión. Aun cuando se lleguen a acuerdos, estos son tan costosos que al final lo único que queda en la retina del ciudadano es simplemente ruido».

«Y cuando en la radio o la televisión hay ruido, la gente la apaga. La polarización de alguna manera está generando eso y el ciudadano común no está en esa línea (…) Entonces, yo creo que el impacto es muy menor, más allá de que los medios digan o los parlamentarios digan», añadió.

No obstante, Guzmán ve que el Gobierno tiene más opciones de salir airoso en esta pasada. «El Gobierno tiene una carta, que es decir que los nombres los presenta la Corte Suprema. Además, están las agrupaciones de DD.HH. que dicen que Lusic es una persona que ha fallado bien», dice.

«Hasta el momento, solo hemos visto empates que hacen ruido y no llegan a ningún término. En ese sentido, es probable que todos salgan neteados, pero quien aparece como el principal detractor de todo es la oposición y en el mejor de los casos para el Gobierno es empate o lograr dejar en evidencia que ellos ponen el freno», indicó.

El error del Gobierno

Una visión distinta planteó el cientista político y académico de la Universidad de Talca, Mauricio Morales, quien advirtió que «lo que está haciendo el Gobierno erróneamente es presionar al Congreso para obtener la aprobación de ciertos proyectos de ley y el nombramiento de la ministra sin realizar un proceso básico en política que es negociar y la búsqueda de acuerdos».

«El Gobierno no le puede echar la culpa siempre a lo defensivo que es el otro equipo, que es la oposición (…) Esto es pan para hoy y hambre para mañana, porque el van a salir diciendo que debido al carácter no dialogante de la oposición es que no se está avanzando ni en la agenda legislativa ni en la composición de un órgano tan importante como es la Corte Suprema», agregó.

A su juicio, lo que debería hacer el Gobierno «identificar a un magistrado que esté limpio o que no tenga manchas políticas que hagan arder a la oposición. Hoy el Gobierno está provocando mucho a la oposición, es muy fácil salir a señalar públicamente que todo es culpa de la oposición».

«Entonces llegamos al siguiente escenario. Si en su primer gobierno Piñera culpaba sistemáticamente al gobierno anterior, en el segundo está culpando sistemáticamente a la oposición. Es decir, el Gobierno no está asumiendo ninguna responsabilidad y le está achacando la culpa a la oposición», indicó.

En esa línea, Morales sostuvo que «cuando toque dar el discurso el 1 de junio o realizar un balance de estos cuatro años de gobierno, la administración de Piñera ya no podrá aludir sistemáticamente a la oposición como el causante de su derrota, sino que a la poca habilidad política que ha mostrado el Gobierno».

Finalmente, recordó que «el ministro de Justicia ha señalado que la nominación de Lusic está basada en criterios objetivos y de alta relevancia, particularmente atendiendo a su currículum. Sin embargo, existen varias críticas por los votos que ha tenido la ministra a favor de las Isapres y también en relación al Banco de Chile, donde se supone que estaba inhabilitada».

«Entonces, suena muy curioso que justo cuando se está discutiendo el sistema de pensiones y la reforma a la salud, se esté promoviendo el nombre de una ministra que genera polémica política dentro de la oposición», concluyó.