Toda encuesta tiene el propósito de ser un pulso respecto de cómo se están moviendo las tendencias, explica Eugenio Guzmán, decano de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo (ver entrevista al frente).

Y a continuación explica los alcances de la serie de estudios que, a propósito de la presidencial, realizará la UDD para «El Mercurio».-En este caso, estamos midiendo la Región Metropolitana (RM), que normalmente tiene un peso muy significativo en el resultado final (puede llegar al 40% de la votación total del país).

Adicionalmente, elegimos otros dos centros urbanos importantes donde va a haber batallas políticas importantes: Valparaíso-Viña y Concepción-Talcahuano.

Los tres centros seleccionados dan un registro de alcance nacional; no para conseguir un resultado final, pero sí la tendencia.-El plan consiste en hacer tres encuestas que abarquen las tres zonas.

Esta primera, post primarias; una segunda, en agosto, cuando estén inscritos todos los candidatos que irán a la primera vuelta, y la tercera, antes de noviembre.-En el intertanto seguiremos midiendo Santiago, porque la metodología que empleamos en la RM permite mayor rapidez.-Dicha metodología consiste en un panel -que ya está probado durante un año y medio- en el que se ha seleccionado una muestra representativa de 1.200 personas, aleatoria de acuerdo a un sistema que permite representatividad y un error razonable.

Los que contestan habitualmente son 860-880, lo que es una tasa de respuesta bastante alta.

Posteriormente un grupo de psicólogos llama a las personas para preguntar por qué no contestaron y se analizan las respuestas.

Ese panel primero fue seleccionado, luego se visitó en hogar, se les preguntó las características y posteriormente se hizo el compromiso con esas personas, en cuanto a que se les envía por la vía de mensaje de texto la pregunta, y la respuesta que dan es gratis para ellos, pero además acumulan puntaje, que después se puede canjear por distintas fórmulas como tarjeta bip, entradas al cine, o se puede donar, etc.

Este sistema de consulta permanente va permitiendo registrar los cambios que se producen a medida que transcurre la campaña.-En los otros centros urbanos no tenemos este panel, entonces se aplica la forma tradicional «cara a cara», con 400 a 500 unidades en cada parte.

Los resultados no se suman; son distintos, pero dan una idea de cómo se van moviendo las preferencias.-¿La abstención? Sabemos que del 100 % de personas consultadas, una fracción muy alta no va a votar; unos lo van a reconocer y otros no.

En el caso del panel, se ha estrechado esa duda, porque lo hemos preguntado muchas veces, y se parece a los resultados electorales.-¿El aporte diferenciador? Varias cosas: el pulso de lo que está pasando: cómo se está moviendo una masa significativa de electores en centros muy distintos que concentran una cantidad importante de parlamentarios.

En segundo lugar, va a permitir ir observando eventos que pueden tener influencia en la elección.

En tercer lugar, nos mostrará el efecto de hechos particulares: la primaria, la inscripción de candidatos, y más de un mes de campaña.