El futuro gobernador regional de Santiago, cargo que en el largo plazo irá reemplazando al rol que hoy desempeña la intendenta Karla Rubilar, será elegido con un mínimo de 600 mil a un millón de votos.

Después del Presidente de la República, será la segunda autoridad elegida con más votación. Y aunque todavía se discute sobre las pocas atribuciones que tendrá ese jefe regional (por ejemplo, no manejará el orden público como la intendenta), sí tendrá una voz para exigirle y criticar a La Moneda en temas como, precisamente, el orden público.

Hasta hace un mes, Rubilar era la candidata segura de Chile Vamos. Sin embargo, las filtraciones en una misma semana de dos encuestas, aparentemente distintas, en La Tercera (25 de agosto) y luego en El Mercurio (29 de agosto), abrieron una discusión sobre si la actual intendenta era la carta más competitiva frente a al DC Claudio Orrego y el exministro PPD Francisco Vidal, quien posee una alto conocimiento.

1 El pragmatismo de La Moneda

Este hecho alertó a La Moneda. Según publicó La Tercera, propio Presidente Sebastián Piñera en una comida con legisladores UDI, el miércoles 21 de agosto, habría transmitido que la prioridad era ganar la elección a gobernador por Santiago.

A esas alturas los trascendidos de los sondeos que dejaban a Rubilar bajo Orrego y Vidal ya eran materia conversación entre los partidos de Chile Vamos.

El experto electoral de RN, Tomás Fuentes, explica que el gobernador regional ejerce donde vive el 40% del electorado del país y es “quien convive con el Presiden de la República”. “Es quien debiera estar todos los días en directa comunicación con el Presidente. Más allá lo que pueda hacer, es lo que le pueda exigir en materia de seguridad, pensiones, salud, trabajo”.

Jaime Lindh, investigador de Idea País, dice que el gobernador regional será “un actor importante, va a tener más votos que un senador, va a manejar presupuesto, va a tener apoyo electoral, probablemente su voz va a resonar más”.

En esa línea, si resulta electo un opositor, Piñera tendrá que convivir más de un año con ese jefe regional no afín.

A juicio del académico de la UDD Gonzalo Müller (UDI), “más que inquietud, hoy nadie está dispuesto a darse ventaja y cualquier tropiezo abre la puerta”.

El presidente RN, Mario Desbordes, insiste en que hoy Rubilar es la más competitiva y que en esto La Moneda “es pragramática” (ver recuadro).

No obstante, si lo sondeos no favorecen a la intendenta, ese “pragmatismo”, ¿puede jugarle en contra?

2 La aspiración UDI

La foto con las diputadas comunistas Camila Vallejo y Karol Cariola, autoras de un proyecto que rebaja la jornada laboral a 40 horas, destapó la irritación que existe en especialmente en la UDI en contra de la actual jefa regional.

A juicio de Vidal, quien aún no decide si competirá, el interés de la UDI en la gobernación regional quedó expuesto por sus “críticas destempladas” a la intendenta y también por esta encuesta de Natural Phone —que a su juicio habría sido encargada por el gremialismo—, que le daba a Rubilar un 13,6% de las preferencia en una elección regional, versus un 23,4% que obtenía la alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei (UDI).

En esa línea, el factor de Joaquín Lavín, también podría pesar. El actual alcalde de Las Condes ha tenido algunos choques con la intendenta. Y si la UDI apuesta a que Lavín sea el próximo Presidente de Chile, los mismos factores que complicarían a Piñera, de tener que convivir con una autoridad regional de oposición, podrían estar latentes entre una figura, que si bien pertenece a Chile Vamos, no es afín al presidenciable UDI.

“La RM va a ser la madre de todas las batallas en materia de gobernadores regionales, no creo que haya ningún partido dispuesto a omitirse, vamos a tener una pelea con una primaria. Obviamente ganar la gobernación es un primer combo en una pelea larga, siempre ganar el primer round te puede dar una motivación especial”, comenta Müller.

3 Balanza senatorial

Todos los partidos creen que las cartas que sean elegidas en municipios y gobernaciones en octubre de 2020, tendrán un peso en la elección parlamentaria y presidencial siguiente (noviembre de 2021).

 Y el respaldo que pueda dar la autoridad metropolitana, puede incidir en la senatorial por Santiago, donde se definen cinco cupos a la Cámara Alta.

Por un lado, Chile Vamos espera quedarse con tres de los cinco senadores y la militancia del jefe regional también puede influir en que particularmente la UDI o RN se queden con dos de esos escaños senatoriales.