Estudio determinó algunas características de las personas que poseen sobre los 80 años, que en la región suman 5.278.
El 1 de marzo se publicó en el Diario Oficial una modificación a la ley 19.828 que reconoce a la cuarta edad como aquellos que cumplieron los 80 años. En Arica, 5.278 personas tienen esta condición etárea, lo que equivale a un 2.3% de la población total.
Las cifras fueron entregadas por el Programa Conocimiento e Investigación en Personas Mayores (Cipem), de la Universidad del Desarrollo y Caja de Compensación Los Héroes. En este documento además se establece a la región de Arica y Parinacota como la que posee mayor cantidad de habitantes de la cuarta edad del Norte Grande.
Respecto al sexo, 38.5% del total corresponde a va-rones y 61.5% a mujeres. Otro dato importante es que el 49.1% de los adultos mayores presentan algún tipo de dificultad para realizar sus actividades diarias.
En cuanto al lugar en el que residen, 94.8% de las personas de la cuarta edad habita en zonas urbanas y 5.2% lo hace en zonas rurales. El 24.3% pertenece a algún pueblo indígena; el 20.3% posee pobreza multidimensional y el 6.3 tiene un trabajo remunerado.
AVANCE EN 17 AÑOS
Según cifras correspondientes al Censo 2002 y extraídas de la página web del INE, en esos años, 2.363 personas tenían entre 80 y 108 años de edad, lo que hace suponer una mayor expectativa de vida al comparar estas cifras con las entregadas por el Programa Cipem.
El coordinador regional del Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama), Neil Castillo, confirmó que los números demuestran esta teoría entre la población ariqueña. “Por ello se hizo necesario determinar por ley la cuarta edad, ya que las personas de 80 años y más tienen necesidades distintas a las de un adulto mayor de 60 0 70”, dijo.
Castillo agregó que actualmente la población mayor es también más activa y autovalente que hace unos años. “Como país se deberán crear programas especiales para la cuarta edad, orientados al apoyo psicosocial básicamente. Estamos presentando uno relacionado con los síntomas de salud mental que presenta un adulto mayor y que están relacionados con cuadros de ansiedad y depresión”, sentenció.