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Escenario presidencial 2017: esperanza y frialdad al mismo tiempo para todos los precandidatos – Cambio 21

Con Guillier robándose la película, al punto de poner en duda la realización de la primaria del 2 de julio, la Nueva Mayoría comenzó el año de campaña. Por ahora, los candidatos chicos no aparecen y siguen ganando los que no votan por nadie.

Con un país enfermo de «encuestitis aguda», era inevitable que los sondeos del Centro de Estudios Públicos, Cerc-Mori, Adimark y Cadem Plaza Pública se transformaran en el principal barómetro presidencial y en el depositario de las primeros lineamientos políticos de la Nueva Mayoría, la derecha y los movimientos alternativos.

De acuerdo a los datos duros, el exmandatario Sebastián Piñera y el senador Alejandro Guillier se consolidan como las cartas más competitivas, mientras que el exgobernante Ricardo Lagos, el senador Manuel José Ossandón y el exministro José Miguel Insulza aparecen estancados.

El índice más revelador proviene del trabajo de campo de Cerc-Mori: en un hipotético escenario de segunda vuelta Guillier vencería a Piñera por 35% a 30%, guarismo que reconfiguró el debate a todo nivel.

De hecho, en el oficialismo los apoyos cruzados a favor del periodista se suman sin rodeos y en Chile Vamos, hasta antes de los resultados del CEP, no se descartaba buscar un «plan B» que mejorara el complejo panorama con el que la oposición terminó el año.

Sin vacilar marchar

Incluso desde antes de la proclamación de Guillier, que se efectuó el 7 enero en la cúpula del Parque O’Higgins, había comenzado la fuga de algunos legisladores del PS y el PPD hacia su postulación.

En el caso de los diputados socialistas Daniel Melo y Daniella Cicardini y otros, fue a contar de la bajada de Isabel Allende como carta presidencial, sumada a la visión crítica que genera la administración de Ricardo Lagos (2000-2006), mismo elemento que para el diputado PPD Tucapel Jiménez justifica su respaldo hacia el abanderado del radicalismo.

Lo que viene ahora es una ronda de conversación con los partidos que estén interesados en conocer la postura del periodista. El primero fue el PC. Los demás serían el MAS y la IC, donde el principal foco será el programático basado en el trato que tendrían las reformas presentadas en la gestión de Michelle Bachelet en un eventual gobierno suyo.

«Hay cosas de continuidad y cosas de cambio. Es inevitable», sostiene Ernesto Velasco, timonel del PR. «Él ha dicho en el caso de las reformas que en la línea estratégica estaban bien inspiradas y él las compartía, pero en la implementación había faltado diálogo. El concepto de reforma tiene gradualidad y eso no lo hubo», agregó.

«Esto será un proyecto colectivo. Nosotros esperamos que la Nueva Mayoría tenga una propuesta común», aclaró el dirigente.

Zona de confort

Ante la crudeza de los números y la molestia de las directivas por la presencia de miembros del PPD-PS en el acto de Guillier, el «laguismo» optó por tragar saliva y centrar la mirada en la primaria del 2 de julio.

«¡Estamos aquí para cambiar la encuesta!», dijo Lagos en un video que se emitió por las redes sociales instantes después de las magras cifras del CEP.

«El escenario está muy abierto todavía» y la intención de voto «es muy poco clara hoy día», dice Gloria de la Fuente, vocera de campaña. Gonzalo Navarrete, timonel PPD, insiste con que la primaria resolverá las dudas. Y Rabindranath Quinteros, coordinador de los senadores PS, dice que Lagos no sube porque su partido aún tiene ninguna definición presidencial y que mientras esto siga pendiente, «vamos a seguir perdiendo espacio».

Mientras el cronograma indica que el PPD proclamará a Lagos como su candidato el próximo 14 de enero y el PS resolverá la modalidad para elegir a su abanderado una semana después, la indicación parecer ser solo una: mantener al exmandatario de pie en los partidos y buscar la adhesión en dos nichos que han sido esquivos con él: jóvenes y sobre todo mujeres, como enfatizó De la Fuente.

Por de pronto, el cientista político Alejandro Olivares aseguró a Cambio21 que «el militante tradicional de la Nueva Mayoría, por lógica, apoya a un político como Lagos, que es un hombre de partido y que genera un respaldo transversal bajo el emblema de lo que fue la Concertación, dado que conoce los códigos internos y respeta los acuerdos».

«El dilema se va a instalar cuando esos mismos militantes y simpatizantes que van a estar con Lagos o el que venga tercero, cuarto o quinto o se sumen a la opción de ganar con un candidato distinto, independiente y que no es del sector, pero que adscribe a la MN y que va primero», comentó.

Otro factor: «los partidos y sobre todo los candidatos al Parlamento intentarán acelerar la campaña presidencial teniendo como fecha final la inscripción de los pactos ante el Servel», indicó a este medio el académico de la Universidad Central. Marco Moreno.

«Es un largo tiempo en el que Guillier le seguirá dando energía a la NM y donde su opción se consolidaría para derrotar a Piñera. Por eso que será una fase política de duda, porque tendrá un gran rendimiento electoral en las encuestas que de a poco desactivará a las demás candidaturas», añadió.

Eugenio Guzmán, experto electoral de la Universidad del Desarrollo, explica que Guillier capta gente que proviene de «sectores más a la centroizquierda o desencantados de la NM que Lagos no logra convencer y que tienen poco interés en la política», factor que no lograría impedir que Lagos gane la primaria aún con el exrostro de TVN y CHV arriba en las encuestas.

Sin embargo, Olivares destacó que «como los partidos no son ni hogares de beneficencia, ni clubes de fútbol, ni centros de madres y sí son entidades que se disputan el poder para desarrollar sus ideas, lo más probable es que terminen apoyando al ganador. Si no es la primaria misma, debería ser antes y dependiendo de las encuestas o la negociación política que adopten los partidos».

«El tema es que no se puede volver a repetir lo que pasó en 2009, cuando la Concertación se vio obligada a competir con un candidato propio (Frei Ruiz-Tagle) frente a otro independiente que terminó yendo por fuera (Enríquez-Ominami)», advierte Moreno.

Por tal motivo, el diputado Daniel Melo propone que el PS «inicie un camino de diálogo hacia la candidatura de Guillier, donde los restantes precandidatos analicen con realismo su situación antes de la primaria».

«El camino trazado es la primaria del 2 de julio y para allá deben estar enfocados todos nuestros esfuerzos», responde el senador Quinteros.

Desde fuera, el columnista Carlos Peña le aconseja a Lagos que «muera con las botas puestas», toda vez que hasta ahora «no ha sido fiel a sí mismo» y que con el «abandono o al menos el ocultamiento del orgullo por lo que hizo la Concertación ni gana amigos ni derrota enemigos».

Moreno aporta con el azote final: «Lagos debe confrontar a Guillier y llevarlo a que tome posiciones y sacarlo de la zona de confort que da la ambigüedad».

¿Brilla el sol?

El entusiasmo que brota en la DC respecto al tema presidencial y la chance de competir en la primaria, o incluso de llegar a la primera vuelta, chocan con la falta de rating ciudadano que tienen sus potenciales candidatos: Carolina Goic, que retuvo la testera del partido con el 65% de los votos, y las exministras Ximena Rincón y Mariana Aylwin.

Si bien Goic goza del respaldo transversal en la falange, por tratarse de una figura relativamente nueva, fue la misma senadora la que enfrió los cánticos al manifestar que «fui elegida por los militantes como presidenta por los próximos dos años, y es desde allí donde voy a colaborar a fortalecer, no solo a la DC, sino que también a la actividad política y a la confianza de los chilenos».

«Cada uno de los partidos tiene fijado su itinerario, y en el caso de la DC, va a ser el 28 de enero, en nuestra Junta Nacional, donde vamos a aprobar primero nuestros lineamientos programáticos, que son el eje de una candidatura presidencial», remarcó.

Ricardo Hormazábal, postulante derrotado en el proceso interno, pide «escuchar a la gente», toda vez que «cerca del 70% de la militancia, acorde al momento de crisis que vive la política, no fue a votar».

«Sin embargo, existe un tema cultural que viene antes, que son los partidos políticos, y acá la DC tiene el doble de votantes que el PR y es el más votado de la NM. Por ende, alguna importancia debe tener en la toma de decisiones», aseveró.

Para finalizar, el diputado Pablo Lorenzini admite que ante la «falta de liderazgos» todo el esfuerzo radica en el pacto parlamentario. «Si queremos tener un candidato presidencial propio nos van a exigir que tengamos lista de candidatos al Congreso por fuera. Y resulta que los números no dan. Ojalá que en la Junta Nacional se logre construir una buena propuesta y que no sea un disparar para todos los lados sin nada concreto», alertó.

Cualquier mención a la «cocina» es mera coincidencia.

Fuera de concurso

Los restantes presidenciables que quedaron en la parte baja de las encuestas o lisa y llanamente no salieron mencionados, apelaron a la vieja máxima que se usa después de una elección o un sondeo relevante: no se gana ni se pierde, se explica.

Desde la derecha, Ossandón (1% en CEP y Adimark) dijo que aún no comienza su campaña y que no tiene considerado bajarse.

Jorge Saint-Jean, secretario general de Evópoli salió en defensa del puntaje logrado por el abanderado del partido Felipe Kast (56% de conocimiento en Adimark y 18% de aprobación y 40% de rechazo en el CEP).

«Valoramos que a sólo un mes de campaña, Kast haya alcanzado a Ossandón en el nivel de confianza, siendo que el candidato lleva bastante tiempo. La cancha está muy abierta y todavía uno de cada dos chilenos no sabe por quién votará en la próxima elección», nos comentó.

En la misma tónica, José Miguel Insulza (PS), anticipándose al 1 y 2% que marcó, sostuvo en estas páginas que «no me angustio tanto por las encuestas, que por lo demás fueron tomadas antes de que yo anunciara mi candidatura».

Marco Enríquez-Ominami (PRO), en tanto, optó por el derecho a mantener silencio y a seguir con el proceso de reinscripción de sus militantes. El 1% de preferencia en el CEP echó por tierra su alto nivel de conocimiento.

«¡No les creo a los sondeos!», exclama Roxana Miranda, excandidata en 2013 y líder del nuevo partido Andha Chile. «Ni siquiera sabemos cuántos chilenos somos. Soy de las que cree que los datos los manipulan para generar tendencias raras. Todo para seguir igual. Por eso que da lo mismo que algún día saque el 1% o varios por cientos más. ¿Cambia algo? Nada. Cuando recuperemos algunos espacios que nos pertenecen como pobladores, ahí conversemos», remató.

Así como Miranda quedaron en blanco los senadores de RN Alberto Espina y Francisco Chahuán, el diputado PPD Jorge Tarud (reclamó que el CEP lo dejó fuera del conteo), el constitucionalista PS Fernando Atria y los independientes Carola Canelo, Marcel Claude, Tomás Jocelyn-Holt y Nicolás Larraín.

Ojo que el empresario Leonardo Farkas y el economista Franco Parisi (exabanderado en 2013) siguen mancando. Mauricio Morales, analista de la Universidad Diego Portales, apunta que «con la primaria muchos candidatos que andan por ahí se reducirán casi como un efecto licuadora».

«En 2013 hubo nueveVer no candidatos con una clara favorita como Bachelet. En cambio ahora debieran existir más porque no hay favoritos claros. De hecho, no ha habido proclamaciones, solo anuncios de nombres alternativos», concluyó.

Para terminar, «entre enero y marzo» el Frente Amplio debiera tener resuelto el ítem presidencial, «Somos muchas organizaciones que poner de acuerdo», declaró el diputado autonomista Gabriel Boric, una de las caras visibles del bloque junto a Giorgio Jackson (RD), quien en tono autocrítico dijo que «nosotros no hemos presentado alternativa y hay casi un 50% de personas que dicen no tener candidato. Esperamos poder llevar ese vacío».

Dos que tienen el cartel de posibles son Tomás Hirsch (PH) y Cristián Cuevas (exPC).

Ver nota publicada en:http://www.cambio21.cl/cambio21/site/artic/20170113/pags/20170113165103.html