«El Líbero» conversó con los académicos y expertos electorales Gonzalo Müller, Mauricio Morales y Claudio Fuentes para analizar algunos de los efectos de esta primera elección con sistema proporcional.
155 cupos en la Cámara de Diputados y 23 en el Senado son los que se disputarán en la próxima elección del 19 de noviembre. Pero estos comicios tienen algunos rasgos en sus plantillas parlamentarias que no se habían visto tan nítidamente antes.
Por ejemplo, pese al cambio del sistema electoral, aún hay regiones en las que piensan en modo binominal; ahora hay una ley de cuotas exigente; se ve con mayor nitidez a los candidatos que van de “teloneros” del candidato principal; y se observa una mayor dificultad para que los descolgados salgan electos.
“El Líbero” conversó con los académicos y expertos electorales Gonzalo Müller, Mauricio Morales y Claudio Fuentes para analizar algunos de estos nuevos efectos de esta primera elección con sistema proporcional.
En esta elección es obligatorio que los pactos lleven al menos un 40% de mujeres en sus listas, lo que ha generado que con el afán de cumplir el número, algunas no sean lo suficientemente competitivas. “El tema de la inclusión de las mujeres al Parlamento no quedó bien resuelto con la ley de cuotas. Nos vamos a dar cuenta que van a haber cientas que prestaron su nombre y RUT para la competencia electoral, pero que no son candidatas”, dice el académico de la UDD Gonzalo Müller. Esto podría llevar a que mujeres sólo vayan a hacer un “saludo a la bandera” en esta elección parlamentaria.
Según el director del centro de análisis políticos de la Universidad de Talca, Mauricio Morales, puede generar que “se produzca la diferencia más grande en los promedios de votación entre hombres y mujeres”, ya que “en el binominal había un diferencia de cinco puntos entre hombres y mujeres, pero ahora tengo la sensación que esa cifra se va a duplicar -como mínimo-, porque los partidos decidieron rellenar los cupos para cumplir la ley de cuotas y no realizaron un trabajo de formar cuadros femeninos competitivos”.
Uno de los fenómenos que se da en esta elección es ver a algunos candidatos fuertes acompañados en sus listas por nombres desconocidos en el concierto nacional, pero con algún tipo de liderazgo local. Una suerte de “teloneros” con nulas posibilidades de salir electos pero que tienen llegada en lugares donde el “artista principal” no.
Para el académico de la Universidad Diego Portales, Claudio Fuentes, el “sistema está pensado para -como saben que no se van a elegir todos los candidatos- llevar una lista lo más nutrida posible, de modo de poder sumar votos a la lista y que le ayude al candidato más votado”. En tanto, Mauricio Morales dice que “esto tiene una dimensión estratégica. De otra manera no se explica que exista tanto candidato con cero opción de ganar, si no es por el simple hecho de que el candidato que es cabeza de serie busque sumar puntos donde él no podría llegar”, y da un ejemplo: “En el caso de (Andrés) Velasco, uno podría pensar que los compañeros de lista son desconocidos, pero bien le podrían hacer el trabajo en las zonas rurales, donde él no es tan conocido. Esto podría permitir que Velasco haga campaña en Curicó, Talca y Linares, y deje lo rural en manos de los otros cuatro candidatos, y que hagan finalmente que Velasco gane”.
El caso de Fulvio Rossi (ex PS) y Rojo Edwards (ex RN) es un tema que preocupa dentro de las coaliciones políticas. Esto, porque no van dentro de la lista oficial del sector. “Prácticamente no tienen posibilidades de ser elegidos. Cuando hay que competir con listas de ocho y hasta nueve candidatos. Incluso caudillos como Soria han decidido ingresar a las listas de los grandes conglomerados”, dice Gonzalo Müller. De la misma manera, Morales sostiene que “en el caso de Rossi, su postulación como independiente fuera del pacto, anula o pone más difícil que la centro izquierda como bloque se quede con los dos cupos, y podría entregarle gratis un cupo a Chile Vamos”. Lo mismo, explica, podría ocurrir con “Rojo en la Araucanía, donde le podrían regalar un cupo a la centroizquierda -a la DC o a los partidos de Guillier-, ya que el simple hecho de que los descolgados compitan como independientes castiga a sus coaliciones de origen y premia a las que fueron enemigas toda la vida”. Es por eso que, comenta Fuentes, era “tan importante para Chile Vamos negociar con Rojo, porque saben que ponen en riesgo el tercer cupo de la coalición en esa región”.
Pese a que este año debutará la reforma electoral proporcional, algunos siguieron pensando en modo “binominal”. Lo cierto, dicen los expertos, es que en las regiones donde sólo se eligen dos asientos, es imposible descartarlo, ya que de cierta manera sigue presente. Un ejemplo es lo que ocurre en Atacama, Tarapacá, Arica y Parinacota y Aysén. “Cuando hay cinco asientos, la tendencia a la competencia es mayor, pero cuando hay dos, el acuerdo político es clave. Es mucha concentración de votos, es mejor pactar”, dice Fuentes. En tanto, Morales dice que “siempre van a haber resabios del binominal y es natural que pase en esas regiones, porque son binominales”, y explica que así se entiende el movimiento de José Miguel Insulza, ya que “hay incentivos cruzados. Por un lado el PS tenía el incentivo de conseguir apoyos del PC; el PC tenía el incentivo de recibir apoyo del PS en Atacama, y el de la DC era sacar a José Miguel Insulza de Atacama, llevarlo a Arica y de esa manera evitar que se potenciara la lista de Guillier, y que Yasna Provoste peleara el cupo en la zona”.
“Estábamos acostumbrados a tener una papeleta de ocho o nueve candidatos, ahora va a superar los 30 o 40 en algunos distritos. A eso, hay que sumarle los candidatos a Core, senadores y presidenciables. Podríamos tener lugares que pueden circular entre los 60 candidatos”, advierte Morales sobre la elección de noviembre. Esto, añade, produce “un incremento sustantivo en los costos de información para la gente, y ahí va a pasar algo entretenido: nosotros hicimos un trabajo, donde comparando elecciones de papeletas grandes como la de concejales 2016, concejales 2012 y Cores 2013, se revela que los candidatos que van primero cosechan más votos por el hecho de encabezar la lista”.